domingo, 16 de diciembre de 2007

ADVERSIDADES DE UN CABALLERO ENAMORADO

La mujer que más me duró fueron 15 días. Hubo una que duró menos de un día. Pero yo no fui el culpable, fueron ellas, atorrantas inmorales que juegan intermitentemente con la ilusión y los sentimientos ajenos. Nunca voy a entender cómo o por qué vuelven con sus ex. ¡SI NO VA A CAMBIAR!. Pero algo las impulsa. Soy de esos que creen ver en las mujeres seres masoquistas, porque de otra manera hay cosas que no se pueden explicar...
Y lo peor de todo es que siempre hay un boludo cerca para llevarles el apunte.
Los caballeros ya no aprenden más. La cosa es plantarse y chamuyar. No sirve de nada la ética y la moral, la compañía incondicional, el amor eterno; lo único que hay que hacer es gozar, Si total!
A Usted le digo, si está leyendo en este momento. Por favor, deje de remarla, no se preocupe que no vale la pena. Todo el trabajo que va a hacer usted, todo lo que de se va a esfumar cualquier día con el mismo y molesto chamuyo de siempre: Creo que deberíamos tomarnos un tiempo. No sos vos, soy yo.......